OAXACA, OAX., mayo 19.- A la sombra de los árboles de sauz que crecen solos en la ribera del Río Atoyac, recostado boca abajo, con la pierna izquierda y la mano derecha flexionadas sobre la tierra, fue encontrado muerto y en estado de descomposición el cuerpo de un hombre de aproximadamente 38 años de edad.
Tenía una lesión en la cabeza. Un arenero lo encontró en inmediaciones del municipio conurbano de San Jacinto Amilpas. Según los peritos, llevaba unos dos días de estar sin vida. Al parecer lo ejecutaron en el lugar por la forma en que quedó recostado.
A las 18:30 horas de este lunes el arenero Rodolfo García Hernández se dirigía a su “criba” en el otrora caudaloso Atoyac, a la altura del Bar “El Pasito Duranguense”. Con su pala al hombro caminó la vereda para salir a la carretera, pero le llamó la atención un hombre que estaba recostado bajo un árbol, al lado del lugar conocido como “La Lagunita”.
Pensó que dormía y se acercó, pero ya no se movía. Estaba muerto, por lo que pidió auxilio a los cuerpos de rescate.
Paramédicos de Protección Civil del Ayuntamiento de San Jacinto Amilpas confirmaron que el hombre, de aproximadamente 38 años de edad, ya estaba sin vida y en estado de putrefacción.
Vestía sudadera blanca, pantalón negro de mezclilla tipo cholo, cinturón café y zapatos café flexi. La cara la tenía cubierta con una bolsa de plástico. A un costado estaban dos pantalones y papel higiénico.
Un Agente del Ministerio Público (AMP) y peritos de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) revisaron el cuerpo y entre las ropas sólo encontraron un encendedor.
El médico legista comentó que al parecer le pegaron con un tubo. Por la forma en que quedó, el hombre habría sido ejecutado en el lugar. Lo hincaron y le golpearon la cabeza.
El cuerpo fue trasladado al Anfiteatro de la Ciudad para la práctica de la necropsia de ley, en espera de que sus familiares lo reconozcan y lo reclamen legalmente. Quedó en calidad de desconocido.