OAXACA, OAX., noviembre 28.- La Confederación de Trabajadores de México (CTM) y el Sindicato Libertad, firmaron la tarde de ayer un pacto de no agresión y coordinación en las obras públicas del Gobierno del Estado, poniendo fin al conflicto entre ambos.
Tras varias horas de diálogo, Erick Luis Villaseca e Iván Cabrera Velasco, líderes de ambos grupos, firmaron el acuerdo en un conocido restaurante ubicado en la calzada Porfirio Díaz.
En conferencia de prensa, el secretario general del Sindicato Libertad, Erick Luis Villaseca, explicó que la tregua fue una iniciativa de ambos grupos ante la incapacidad de la Secretaría General de Gobierno (Segego) para lograr acuerdos entre los trasportistas y es que las mesas de diálogo sólo han sido una pérdida de tiempo, manifestó.
“Si no lo hacemos nosotros nadie lo hará, ahora los transportistas pensamos de otra manera y tratamos de arreglar las cosas porque sabemos que el Gobierno no lo va hacer, porque siempre le va al mejor postor y así nunca vamos a caminar”, dijo.
En tanto Iván Cabrera Velasco, subsecretario de Transporte de la CTM, aclaró que el pacto aún no alcanza el 100% de las modalidades de transporte, ya que apenas están incluidos taxistas y mototaxistas, pero se espera que en los próximos días se incluyan también los volteos y las pipas de ambos grupos.
Asimismo, los líderes de transportistas demandaron a las secretarías de Seguridad Pública (SSP) y de Vialidad y Transporte (Sevitra) llevar a cabo operativos permanentes para que detengan a los transportistas que trabajan en la ilegalidad.
En ese sentido, Cabrera Velasco reiteró la disponibilidad de la CTM para dialogar con las autoridades correspondientes en torno a la regularización del trasporte en el Estado y de esta forma se aplique la ley.
“Se supone que tenemos una ley de transporte, pero no ha sido aplicada, por eso yo les digo vamos a poner el ejemplo, nosotros ya nos sentamos, ahora el Gobierno que le entre”, demandó.
Con dicha tregua se prevé que terminen los bloqueos por parte de ambas organizaciones, sin embargo, en este pacto no fueron incluidos la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), ni tampoco la Confederación Nacional de la Productividad (CNP), que en un principio fueron los aliados principales del Sindicato Libertad.