CIUDAD DE MÉXICO, DF.- El pleno del Senado de la República aprobó por unanimidad el dictamen emitido por la Comisión de Salud, referido a una propuesta presentada el 26 de agosto de 2009 por el entonces senador de la República y hoy gobernador electo de Oaxaca, Gabino Cué, relacionada con la recolección y disposición final de medicamentos caducos.

Al sustentar su propuesta, el entonces legislador llamó la atención sobre el grave riesgo que implica el que tales fármacos sean tirados a la basura y posteriormente recolectados para su reventa en el mercado negro.

Por ello, Cué sostuvo que la industria farmacéutica, en coordinación con el gobierno federal, debe realizar campañas informativas que creen conciencia entre la población sobre los riesgos de tomar medicamentos que ya hayan prescrito, así como implementar programas que ofrezcan alternativas de recolección y disposición final de dichos productos.

Entrevistado al respecto, quien rendirá protesta como titular del Ejecutivo estatal dentro de 20 días manifestó su satisfacción, pues se trata –dijo- de medidas preventivas que pretenden detener acciones que pongan en peligro la salud de la población o sean factor de contaminación del medio ambiente.

En este sentido consideró apropiados tanto los términos del dictamen propuesto por la Comisión de Salud del Senado, como la aprobación de los tres puntos hecha por el pleno camaral.

En el primero de los puntos, el Senado solicita a las Secretarías de Salud, y de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca, que conforme a sus competencias, le informen respecto a los programas y acciones que se están realizando en materia de recolección y disposición final de medicamentos caducos.

Asimismo, que ambas secretarías implementen una campaña informativa de carácter permanente para la toma de conciencia de la población sobre los riesgos de auto prescribirse y de la ingesta de medicamentos caducos.

Finalmente, el Senado de la República invita a los fabricantes y distribuidores de medicamentos en todo el territorio nacional, a que coordinados con sus respectivas cámaras empresariales desarrollen una campaña informativa permanente, que promueva el adecuado desecho de los medicamentos caducos.

De acuerdo con estimaciones de la Asociación Nacional de Farmacias de México (ANAFARMEX), en nuestro país se producen 900 millones de unidades de medicamentos al año, de los cuales el 10%

es susceptible de caducar; es decir, 90 millones de productos. Aproximadamente el 60% de ellos tiene retorno y en consecuencia son destruidos de acuerdo a la norma correspondiente.

Sin embargo, el otro 40% se queda en los botiquines de los hogares y farmacias, teniendo un destino indebido como son los basureros, cañerías, reciclaje, etc., generando con ello un riesgo para la salud y un impacto nocivo al medio ambiente.

Por su parte, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) estima que en México existen más de 250 laboratorios que producen, distribuyen y comercializan cada año alrededor de 2 mil millones de unidades de medicamentos, de las cuales aproximadamente el 10%; es decir, unas 200 millones de unidades caducan cada año.