OAXACA, OAX., agosto 9.- Trabajadores de la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR) denunciaron que a pesar del cambio de su delegado Enrique Correa Utreras “la corrupción y la prepotencia sigue imperando en la dependencia federal”, ya que “no hay respeto laboral”.

Los empleados, que pidieron omitir sus nombres por temor a represalias, demandaron a la procuradora general Marisela Morales que quien llegue como relevo de Correa Utreras “sea una persona honesta y responsable”.

Acusaron directamente a la Subdelegada Administrativa, al Oficial de Partes y al Coordinador de Servicios Periciales de “continuar operando arbitrariamente, pese a la salida del Delegado”, pues les exigen más de diez horas de trabajo sin pago extra.

“La salida es a veces hasta después de las 22:00 horas y la mayoría de los trabajadores no cuenta con vehículo para trasladarse a sus domicilios, lo que implica un riesgo para su integridad física, ya que la zona donde están ubicadas las oficinas de la PGR es considerada como peligrosa”, señalaron.

Los inconformes, que aseguran son 100 de los 140 que conforman la planta laboral, insistieron en que no quieren otro delegado como Correa, pues a pesar de que han denunciado las anomalías de manera interna no les han hecho caso.

Indicaron que el ex delegado Enrique Correa Utreras dejó “cuentas pendientes”, ya que existen denuncias en su contra por presunto acoso sexual, pero por miedo las víctimas no han continuado el procedimiento interno.

Señalaron que el ex funcionario federal trabajó para su beneficio personal, además de que ofrecía a las trabajadoras un mejor puesto a cambio de acceder a sus condiciones.

Dijeron que Correa colocó a estudiantes de Derecho en cargos de Ministerio Público, como ocurrió en la Cuenca del Papaloapan, en tanto que la encargada de Comunicación Social tuvo que renunciar por no aguantar la “presión”.

Los inconformes manifestaron que en cuanto conozcan el nombre del nuevo Delegado de la PGR darán a conocer al detalle cada una de las situaciones que se viven en esa dependencia federal.