OAXACA, OAX., octubre 11.- “Periodistas son quienes logran hacer el bien por la sociedad y quien hace eso vivirá eternamente”, afirmó emocionada la periodista Arcelia Yañiz Rosas tras recibir su título profesional como Periodista, en un acto realizado este viernes en la Biblioteca Burgoa.
Ante la representante de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Alejandra Reyes Guzmán, subdirectora de Acreditación de Conocimientos; Teodoro Rentería, presidente del Consejo de Titulación por Reconocimiento de Saberes Adquiridos, así como el presidente de la Asociación de Periodistas de Oaxaca (APO), Abraham Cruz García, y Felipe Sánchez, columnista y representante en Oaxaca de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, la maestra Arcelia Yañiz recibió además el reconocimiento de sus colegas.
“Aquí sobran las palabras, es maravilloso, volví a nacer”, apuntó la maestra Yañiz Rosas, quien a sus 95 años de edad y 80 en el ejercicio periodístico recibió su Título de Licenciada en Periodismo, y añadió que la entrega de su título profesional es un acto donde “se encuentran la verdad, el humanismo y la experiencia”.
Desde niña supe que sería escritora, agregó; incluso, lo conversó con el entonces presidente de México, Lázaro Cárdenas del Río, a quien entrevistó en alguna ocasión, lo que le hizo ganarse el puesto de reportera en un diario de la ciudad de Puebla en la década de los años 30 del siglo pasado.
Por su parte, Teodoro Rentería hizo un recuento de cómo se logró que las y los profesionales del periodismo mexicano alcanzaran el reconocimiento académico que hasta hace algunos años no era conveniente para los dueños de las empresas periodísticas.
Apuntó que la ceremonia de entrega del Título Profesional a la decana del periodismo mexicano es un hecho histórico debido a que antes ninguna persona con 95 años había recibido este mérito académico.
En su momento, la representante de la SEP, Alejandra Reyes Guzmán, resaltó el trabajo que durante más de ocho décadas ha desarrollado doña Arcelia Yañiz, un gran ser humano y una periodista excepcional.
SEMBLANZA DE ARCELIA YAÑIZ ROSAS
Arcelia Yañiz Rosas nació en la Ciudad de Oaxaca el 18 de agosto de 1918. Estudió la carrera de Taquimecanografía en el Instituto de Ciencias y Artes de Oaxaca, donde presentó el examen profesional en 1934.
Por su cuenta y voluntad se hizo periodista cuando apenas tenía 16 años de edad. Hoy tiene más de siete décadas como periodista. Sus colaboraciones se publicaron en El Oaxaqueño, La Opinión de Puebla, El Mundo de Guadalajara, la revista Iris de Tehuacán, la revista Bellas Artes y Oaxaca Gráfico, en Oaxaca. Editó la revista Síntesis Gráfica y continúa publicando en El Imparcial de Oaxaca.
En los medios ha sido reportera, redactora durante diez años y directora por cinco más. Asegura que “cuando uno huele la tinta nunca puede dejarla”. Y esto hizo que su vida transcurriera entre sus tres grandes pasiones: el periodismo, el teatro y los libros.
Dada su condición de mujer, durante mucho tiempo sufrió el acoso de quienes quisieron callarla, entre ellos un general al que le preguntó quién había autorizado que el ejército entrara al Tecnológico en 1968, y debido a un asunto de talamontes de Miahuatlán y del Valle Central. “En el periodismo no se debe ver la vida de las personas, sino a quien tiene la razón cuando denuncia” .
Tres años después, iniciada su actividad periodística, Arcelia decidió trasladarse a la ciudad de Puebla, con apenas 19 años. En La Opinión, diario de la Angelópilis, la condición para darle una plaza fue entrevistar al entonces presidente de México, general Lázaro Cárdenas del Río.
La encomienda –piensa hoy doña Arcelia– era un reto para mí, en tanto que ellos pensaban que con eso yo desistiría. Pero por supuesto que consiguió la entrevista que fue publicada a “ocho columnas”.
Como periodista Arcelia Yañiz acompañó en 1953 a la profesora Patrocinia Zaragoza a una reunión del Congreso Nacional Femenino en la Ciudad de México para presenciar –en compañía de mujeres de todo el país– la aprobación del derecho de las mujeres al voto.
A la mañana siguiente, en un periódico, la nota era: “Las mujeres se fajaron los nylones”. Se refería a que las mujeres nos habíamos fajado las pantaletas, explicó en una entrevista.
Fue integrante de la Junta de Ayuda a España en 1936, participó en el Ateneo Adalberto Carriedo del Instituto de Ciencias y Artes de Oaxaca, en la Asociación Folclórica Oaxaqueña, A.C.; fue integrante de la Sociedad de Escritores Revolucionarios encabezada por Darío L. Vasconcelos, regidora en el H. Ayuntamiento Obrero de la ciudad de Puebla como representante del Sindicato de Redactores de la Prensa.
Viuda muy joven y con tres hijas y un hijo que sostener, Arcelia Yañiz desafió las costumbres de la época. En las mañanas era reportera, en las tardes daba clases en la escuela de Bellas Artes y en las noches iba al periódico.
Ha recibido una gran cantidad de homenajes y reconocimientos, entre los que resaltan la medalla Andrés Henestrosa en 1996, la medalla Donají otorgada en 1998 por el Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez; en 1988, el Gobierno del Estado le entregó la medalla Benito Juárez García del Premio Estatal de Periodismo en la categoría de Trayectoria Periodística; fue nombrada Mujer del Año en 1996 por un Comité Especial de Premiación de la Mexican-American Opportunity Foundation, en la ciudad de los Ángeles, California.
En 1981 se hizo acreedora a la Medalla Magdalena Mondragón por el ejercicio ininterrumpido del periodismo durante 50 años; en diciembre de 2008 fue reconocida con el Premio al Mérito Ciudadano por su trayectoria como escritora y decana de periodistas por el Consejo de Participación Ciudadana, A.C.; en enero de 2009 el Congreso del Estado de Oaxaca le otorgó el Premio de Periodismo Cultural “Andrés Henestrosa”; en ese mismo año recibió el Premio México de Periodismo 2009 de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos A.C.
Desde 1985 es directora de la Biblioteca Pública Central “Margarita Maza de Juárez”. Inquieta e incansable, en diciembre de 2008 presentó el libro “Teatro en Oaxaca”, con lo que cumplió uno de sus grandes sueños, contar la historia de una de sus pasiones, arte en el que ha sido maestra y mecenas durante decenios.
El año pasado, 2012, presentó su nuevo libro denominado “Oaxaca de mis Amores: cosas, casos y personajes”.
Con más de nueve décadas de vida, Arcelia Yañiz es ejemplo para mujeres y hombres, con un permanente entusiasmo por la vida, que se refleja en cada segundo y en cada palabra que escribe o dice.
Asegura que “mucha gente se queja de trabajar, pero en realidad lo bueno es tener capacidad para desarrollar una actividad”, y promete: “yo lo haré hasta cerrar los ojos”.