EXPRESIONES.- Por fin alguien se decidió a investigar y encontró documentos que revelan que el gobierno federal, a través de la Secretaría de Gobernación (Segob), ha concedido a la Sección 22 (CNTE) pagos de aguinaldos y quincenas caídas, garantías de plazas intocables y hasta ha prometido no sancionar de forma alguna a los maestros que reprueben las evaluaciones indicadas dentro de la reforma educativa o que participen en las movilizaciones, además de comprometerse a pagar tiempos extras e “incentivos de carácter económico por el buen desempeño” de profesores de la Coordinadora.
Todo ello sin obtener a cambio, por lo menos, la reducción de su violencia y su discurso incitador.
La investigación periodística fue hecha por Víctor Hugo Michel, reportero del diario Milenio, y la información la logró a través de la Ley Federal de Transparencia.
En tales documentos públicos queda marcada la injerencia del subsecretario de Gobernación, Luis Miranda, el líder de la Sección 22, Rubén Núñez; el gobernador de Oaxaca, Gabino Cué Monteagudo, e incluso la del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.
Todos ellos han minimizado el papel rector de la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el interés supremo de millones de niños y niñas que durante más de 30 años han visto vejados su derecho a una educación de calidad.
Los principales acuerdos leoninos son los siguientes:
“Que se respeten los derechos de los trabajadores de la educación, no pudiendo cesar a quienes se ausentan de sus plazas por encontrarse movilizados”.
“Que ningún maestro en servicio podrá ser despedido como consecuencia de un mal resultado en las evaluaciones practicadas, y que los maestros conserven sus derechos adquiridos a lo largo de su carrera magisterial”.
“Los maestros participarán de manera activa en el diseño de evaluaciones, las cuales ayudarán a conocer sus fortalezas y debilidades, tomando en cuenta en todo momento la diversidad entre las diferentes regiones del país”.
Como se ve, Segob y Sección 22 ya modificaron en el palacio del Cobián la reforma educativa, sin que ésta haya sido aprobada por el Congreso Estatal, pisoteando de esa forma a la LXII Legislatura del Estado.
¿Qué clase de gobierno está perfilando Enrique Peña Nieto para Oaxaca?
No se le entiende. Por eso su credibilidad sigue a la baja.
Oaxaca de Juárez, Oaxaca, miércoles 20 de mayo de 2015