OAXACA, OAX., agosto 7.- Uno de los tres indígenas triquis ejecutados en viernes pasado en Agua Fría, Juxtlahuaca, estaría vinculado a un homicidio y a una violación tumultuaria, por lo que el móvil de los crímenes podría ser la venganza, el ajuste de cuentas.
Así lo dio a conocer este domingo, en entrevista colectiva, el procurador General de Justicia del Estado (PGJE), Manuel de Jesús López López, quien precisó que los datos de una de las víctimas coincide con los antecedentes penales que tiene documentados la dependencia a su cargo.
El funcionario precisó que el triple asesinato ocurrió el viernes pasado a la entrada de Agua Fría Copala, a la altura de la desviación que conduce al pueblo de San Pedro Chayuco, y no se descartará ninguna línea de investigación.
“No tenemos un móvil específico, pero dentro de las víctimas está una persona que al menos en nombre coincide con los antecedentes penales que hemos encontrado, y ese nombre está vinculado a dos órdenes de aprehensión por homicidio y violación tumultuaria; entonces la venganza podría ser uno de los móviles”, dijo sin revelar el nombre.
El viernes pasado fueron ejecutados en Agua Fría Copala, Álvaro Jacinto Cruz, Francisco Ramírez Merino y José Luis Ramírez.
López López indicó que de acuerdo con las declaraciones que personal de la PGJE tomó el día de los hechos, las personas ejecutadas son de Agua Fría y sólo uno de ellos pertenecía al Movimiento de Unificación y Lucha Triqui Independiente (MULTI).
Ofreció, sin embargo, que independientemente de a qué organización hayan pertenecido los muertos, el compromiso del Gobierno del Estado es detener y castigar a los responsables de los delitos.
El Abogado del Estado reveló que de acuerdo con las primeras investigaciones, un grupo de hombres armados asesinó a las tres personas frente a una miscelánea de Agua Fría, cuando éstos ingerían bebidas alcohólicas.
Precisó que esta versión fue corroborada con base en testimonios de personas que estaban por el lugar, quienes señalaron que la ejecución fue exactamente a la entrada de Agua Fría, en la desviación que conduce a San Pedro Chayuco.
Álvaro Jacinto Cruz, Francisco Ramírez Merino y José Luis Ramírez estaban tomando bebidas alcohólicas en una miscelánea, como a 15 metros, y cuando salían de ahí fueron ejecutados, detalló el titular de la PGJE.
Comentó que las primeras versiones señalaban que se tenía detectado a un sólo tirador, pero de acuerdo con los testimonios fueron tres los asesinos, quienes se dieron a la fuga.
El procurador López reveló que una persona salió ilesa del ataque, pero está escondida por temor.
A 72 horas de los hechos, aseguró que la PGJE recabó los primeros testimonios y ya cuenta con la identidad de los probables responsables, para que con base en las investigaciones se soliciten las órdenes de aprehensión correspondientes.
Indicó que a los cuerpos de Álvaro Jacinto Cruz, Francisco Ramírez Merino y José Luis Ramírez los forenses les practicaron las necropsias de ley y posteriormente fueron entregados a sus familiares.
Así, en medio del resurgimiento de la violencia a la zona triqui de Oaxaca, el titular de la PGJE afirmó que el gobierno de Gabino Cué Monteagudo “tiene el compromiso de aplicar la justicia”.
Y como prueba de ello dijo que hay cinco legajos de investigación que se arrastraban desde el 2009 y ya se han ejecutado ocho órdenes de aprensión en contra de personas de la región.
Admitió que la zona triqui “es muy compleja socialmente, con muchos delitos particularmente de lesiones y homicidios”.
Afirmó que “la cultura en la zona triqui no es de la denuncia, sino de la venganza, situación que el actual Gobierno ha revertido, porque los triquis se han acercado más a la PGJE y se ha empezado a trabajar en la vertiente de la justicia por la vía de las instituciones” (sic).
