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Da gobierno de Cué carta de impunidad al Magisterio, acusan los gasolineros

OAXACA, OAX., octubre 31.- Dirigentes y empresarios de la Unión de Gasolineros de Oaxaca-Sureste (UGOS) denunciaron que en la entidad no existe Gobierno porque la administración del gobernador Gabino Cué Monteagudo no hace caso y da carta de impunidad a los integrantes de la Sección 22 del SNTE al no hacer nada ante los actos vandálicos en que incurren contra las instalaciones abastecedoras de combustibles.

Y es que con el cierre este viernes de 15 gasolineras ubicadas en el Valle Central oaxaqueño por parte de integrantes del Magisterio, el saldo es de una gasolinera saqueada y un dispensario (valuado en 15 mil dólares) dañado.

Juan Antonio Vera Carrizal, presidente de la UGOS, cuestionó el doble discurso de la Sección 22 del SNTE porque exige respeto a sus derechos humanos y laborales, pero violenta el estado de derecho y pretende congraciarse con la sociedad saqueando las gasolineras para regalar el combustible a los automovilistas.

“El gobierno de Gabino Cué no hace caso y eso exhibe que en Oaxaca no hay autoridad”, acusó el empresario.

Anunció que los integrantes de la UGOS recurrirán al Gobierno federal para pedir una cita con el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, y el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, a fin de que sepan realmente lo que pasa en Oaxaca.

Vera Carrizal informó que hablaron con el titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), el neo convergente Alberto Esteva Salinas, pero el funcionario no les dio respuesta a su petición de seguridad.

Indicó que ante los desmanes anunciados por el Magisterio para este viernes, los empresarios del ramo acordaron cerrar 15 gasolinerías ubicadas en distintos puntos del Valle Central, pero aun así saquearon la instalada en la Colonia Buenos Aires de San Antonio de la Cal, en tanto que en el puerto de Salina Cruz fue destruido un dispensario con un valor de 15 mil dólares.

Además, los integrantes de la Sección 22 del SNTE se llevaron aditivos y provocaron la rapiña ante la presencia pasiva de elementos de la Policía Estatal (PE), pertenecientes a la SSP que dirige esteva Salinas.

Reiteró que los empresarios no tienen nada que ver en los conflictos y mucho menos con la solución de las demandas del gremio.

Juan Antonio Vera Carrizal dio a conocer que han interpuesto las denuncias respectivas por saqueos anteriores del Magisterio, “pero las autoridades no hacen nada; por eso vamos a pedir la intervención de la Secretaría de Gobernación porque la Policía Estatal no auxilia”.

Dijo que los empresarios gasolineros podrían cerrar temporalmente sus negocios, como manifestación de protesta, pero eso afectarían a la población que no tiene la culpa, “porque los culpables son otros y quienes pagan los platos rotos son los clientes”.

Por su parte, el presidente de Empresarios Gasolineros del Estado de Oaxaca (EGEO), Marco Bellasina Muro, reportó que previo a la toma de los profesores cerraron las estaciones de combustible como medida precautoria.

Aun cuando las gasolinerías tienen sistemas de seguridad para casos de emergencia, cuestionó el vandalismo en que incurrió la Sección 22 del SNTE.

Este viernes, en la continuación de su “plan de lucha” para demandar la aparición con vida de 43 normalistas desaparecidos en el estado de Guerrero, integrantes del Magisterio tomaron las gasolinerías ubicadas en el Aeropuerto, Santa Rosa Panzacola, San Pablo de Avenida Independencia, Fonapas, Calvo Ziga de Porfirio Díaz y Manzano ubicada en Santa Cruz Xoxocotlán.

También los dispensarios de combustibles ubicados en Santa María Ixcotel, Santa Lucía del Camino, y la Antequera de Símbolos Patrios.

Las acciones de destrucción y saqueo en la gasolinería ubicada en San Antonio de la Cal fueron dirigidas por la maestra María del Carmen López Vásquez, mejor conocida como “La Jicayán”, quien actuó durante el conflicto magisterial-popular del 2006.

“La Jicayán” encaró a trabajadores del dispensario de combustibles para exigirles mediante amenazas abrir las válvulas, a fin de robar los energéticos, que finalmente no pudieron realizar y causaron destrozos al inmueble.

 

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