OAXACA, OAX., noviembre 4.- Siendo Colombia el país invitado de honor, en la inauguración de la 34 Feria Internacional del Libro de Oaxaca (FILO) 2014 no podía faltar el homenaje a los recientemente fallecidos Gabriel García Márquez y Álvaro Mutis, amigos del alma, por cierto, pero tampoco el mensaje de “profunda desazón”por los estudiantes asesinados y desaparecidos de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Tixtla, Guerrero, expresado por el director general de la FILO, Guillermo Quijas Corzo.

Después de una delicada operación de la cual se recupera satisfactoriamente, igual era infaltable el homenaje al escritor mexicano José Agustín, ese magnífico representante de la contracultura, el autor “emblema del movimiento del 68, incluso más que José Revueltas”, se atrevió a sostener en su alusión respectiva Hernán Lara Zavala.

La FILO se ha convertido en un foro que viste, sin duda. Se percibe, tan sólo, en que del ambiente político y cultural local nadie faltó ni envió representantes. Ahí estuvieron en el presídium, además de los funcionarios y diplomáticos colombianos:

El gobernador Gabino Cué Monteagudo; el titular de la Secretaría de las Culturas y Artes (Seculta), Francisco Martínez Neri; el director del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), Moisés Robles Cruz; el diputado Martín Vázquez Villanueva, integrante de la Comisión de Cultura y Cinematografía de la Cámara de Diputados federal, y la presidenta de la Fundación Alfredo Harp Helú, Isabel Grañén Porrúa.

Y el que se mueva no sale en la foto…

“Decimos que en México nos reímos de todo, hasta de la muerte, pero hoy dudo que podamos reír cuando ésta se ha revelado en su más descarnado rostro, una máscara inhumana que poco tiene de festiva cuando campea sembrando horror”, lamentó Quijas Corzo.

Por eso, “en noches tan oscuras hay que ir a la palabra, abrir los libros, dejar que su luz rasgue la penumbra. Porque el libro es el artefacto que ha sabido iluminar el tambaleante caminar de la civilización. El libro es esa llama trémula pero firme que aun en la noche más oscura permanece, para esperanza del hombre”.

Por su lado, el gobernador Gabino Cué manifestó su compromiso de “hacer de la literatura un agente de cambio”, al tiempo que anunció el inicio, paralelo al comienzo de la 34 FILO 2014, del Festival NovO de este año, el cual se desarrollará durante todo el mes de noviembre y un poco más.

A la vez, informó sobre la creación de la Casa Refugio para escritores perseguidos -resultado del trabajo conjunto de la FILO, el Centro de las Artes de San Agustín (CASA) y del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta)-, la cual formalmente empezará funciones el primero de enero próximo.

También se refirió al ciclo fílmico en el que OaxacaCine presentará, del 22 al 28 de noviembre, siete estrenos nacionales e internacionales, sin dejar de resaltar el quehacer que en el rubro ha hecho Isabel Rojas, directora de ese proyecto de la sociedad civil, y aludir al ya controvertido caso de la fundación de Cineteca Oaxaca.

Por su lado, el embajador de Colombia en el país, José Gabriel Ortiz Robledo, resaltó la amistad que une a México y Colombia, y prueba de ello, dijo, fue la vida aquí de Gabriel García Márquez y Álvaro Mutis, y de otros artistas como el pintor Fernando Botero y los narradores Laura Restrepo y Fernando Vallejo.

Además de su experiencia propia, pues, dijo, en México “yo me siento como en Colombia, y estoy seguro que no hay un colombiano que se sepa no una sino diez o más canciones rancheras”.

De hecho, “yo me precio de ser el colombiano que más rancheras se sabe: sólo me gana Vicente Fernández”.