EXPRESIONES.- Oaxaca debe verse reflejada en el espejo guerrerense, luego de que la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) y su brazo violento, el Movimiento Popular Guerrerense (MPG), está repitiendo la historia de aquel 2006 en Oaxaca de funestos resultados.
Son las mismas acciones, el mismo pretexto, el mismo sistema de utilizar una organización adjunta como la APPO, ahora el MPG, para incitar y violentar una protesta que pretende ser social y educativa, pero que conlleva grandes dosis de anarquía e intereses aviesos, para después deslindarse de ellos mismos a través de supuestas filtraciones.
Oaxaca ya lo vivió, no puede vivirlo una vez más, sobre todo cuando el Gobierno del Estado sigue prosternado ante la soberbia actitud de la Sección 22 y sus demandas, manifestando por anticipado que no tiene capacidad económica para satisfacer las demandas de su pliego petitorio.
¿Qué va a pasar en Oaxaca cuando la Sección 22 vea rechazada sus demandas, como ya vio la CETEG y el MPG el rechazo de las suyas?
¿La Sección 22 incendiará el Palacio de Gobierno, las sedes de los partidos políticos o el Congreso del Estado?
No es elucubración, ni tampoco criminalizar más de lo que está el movimiento magisterial en Oaxaca, pero ante los hechos vividos, los 32 años de chantaje y presión política, la violencia y prepotencia manifiesta, es momento de que el Gobierno de Oaxaca se sacuda su miedo e intente ordenar las manifestaciones sociales y fije límites a la intolerancia y el vandalismo, que no es lo mismo el derecho a la libre expresión que el libertinaje tolerado por gobiernos medrosos que se escudan en una falsa tolerancia y en un perverso dialogo que no conduce para nada a un mejoramiento de nuestra democracia.
Ni la violencia, ni el miedo deben obstaculizar el desarrollo de los pueblos, por lo que es momento de buscar el orden social a través de leyes y reglamentos que impongan sanciones severas por transgredirlo.
Ver el espejo de Guerrero es un imponderable; volver a vivir otro 2006 sería el acabose para Oaxaca.
Oaxaca de Juárez, Oax., viernes 26 de abril/2013
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