OAXACA, OAX., noviembre 7.- Con lleno total recibió el gimnasio de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO) al equipo de los Campeones de la Montaña, quienes enfrentaron a escritores, todos invitados a la Feria Internacional del Libro Oaxaca (FILO) en su edición número 33.

Más de mil hombres, mujeres y niños se dieron cita para ver trotar el balón que en el tiempo de juego estuvo siempre en manos de los niños triquis, y con un juego muy rápido los campeones que le han dado la vuelta al mundo terminaron por agotar a sus contrincantes, a pesar de que la estatura les beneficiaba.

La gente que se dio cita desde las 3 de la tarde se mostraba ansiosa por ver en la cancha a los campeones de la Selección Triqui de Basquetbol.

A las 05:15 horas de la tarde salieron los aclamados. Las miradas del respetable tuvieron una misma dirección y brotaron los aplausos y los gritos para los niños-deportistas que han puesto en alto el nombre de Oaxaca y de México.

Ahí estaban Melquiades Ramírez, Tobías de Jesús y Bernabé de Jesús Martínez, por mencionar a algunos, quienes se apoderaron del balón para el calentamiento, mientras del otro lado de la cancha también tiraban los rivales del equipo de la FILO-2013.

El árbitro dio la señal para arrancar con el primero de cuatro encuentros que jugaron. Los marcadores quedaron de la siguiente manera: 6-3, 12-13, 24-17 y 43-29; tres de los cuatro encuentros fueron ganados por los niños triquis.

Al gimnasio universitario le cabe un aproximado de 820 personas, pero en esta ocasión acudieron 1 mil 200 asistentes, por lo que 500 personas tuvieron que quedarse afuera, por seguridad.

En todo el encuentro deportivo los gritos no dejaron de estar presentes. ¡Triquis! ¡Triquis! ¡Triquis! Coreaban todos y todas.

En entrevista para www.e-oaxaca.mx, Melquiades Ramírez manifestó que le daba mucho gusto estar jugando un partido de basquet en su Estado, sobre todo por el apoyo incondicional de la gente.

“Se siente bonito estar aquí en Oaxaca; a veces es cansado viajar tanto”, comentó.

El niño deportista triqui reconoció que nunca se imaginó ver a tanta gente reunida sólo para conocerlos y verlos jugar.

Al concluir el encuentro deportivo, fotógrafos y camarógrafos captaron el momento en el que uno de los escritores cargó en sus brazos a un niño de la selección triqui de basquetbol, luego de encestar una canasta de tres puntos.