OAXACA, OAX., agosto 21.- Para revertir la desigualdad social, derrocar el poder de los monopolios e instaurar una nueva economía y nueva nación, en Oaxaca pronto se desembocará un estallamiento y revuelta social que impactara en todo el territorio nacional, alertó el secretario de “Masas” del Comité Central del Partido Comunista de México (PCM), Gustavo Adolfo López Ortega.
Acompañado de Héctor Sámano, vocero de esta organización política revolucionaria de izquierda, anunció la celebración del quinto congreso nacional del PCM en Oaxaca los días 13, 14 y 15 de septiembre, bajo la consigna “La revolución socialista, tarea inmediata de la clase obrera”.
Ahí recordó que en el 2006 Oaxaca vivió la primera gran revuelta social y en este 2014, aún priva una serie de condiciones políticas que hacen prever que uno de los grandes estallidos sociales comenzará en la entidad y será la vía armada por medio de la creación de guerrillas como se podrá cambiar la realidad social de Oaxaca y el país.
De las condiciones para el estallido social, argumentó que Oaxaca es uno de los estados más atrasados en el ámbito de la vida social, además de que la violencia política en estos momentos de la alternancia en el Estado ha cobrado más de 150 actores por cuestiones políticas.
Recordó el asesinato de Antonio Victorino Flores, dirigente del Mosum
“Para el PCM está claro que en Oaxaca se están sintetizando las grandes contradicciones nacionales y en Oaxaca pronto desembocarán de una forma inesperada en un estallamiento y revueltas social que impactará en todo el territorio nacional”, advirtió el también activista de la APPO en el 2006.
Dijo entonces que el estallamiento de la revolución es una tarea inmediata porque las condiciones político legales en el país y Oaxaca se han cerrado para impedir que los trabajadores opten por las vías legales para la defensa de sus derechos.
Afirmó que “se ha fascistizado la vida política nacional con una seria de reformas que corrompió la burguesía del poder al grado de violar la libertad de expresión, por lo que el cuidando es susceptible de ser vigilado con centros de espionaje y bajo sospecha de atentar contra la seguridad nacional, ante ello, pueden ser investigados y detenidos sin orden judicial”.
López Ortega aseguró que hay una serie de supresión legal de los derechos fundamentales aprobados en el Pacto por México que trastocan la vida política nacional y la legalidad existentes. No obstante, dijo que un nuevo régimen es posible “y es la revolución la única tarea y salida para los problemas de este país”.
Aun cuando las organizaciones sociales apoyaron en el 2010 la coalición electoral que encabeza el hoy gobernador Gabino Cué Monteagudo, se dijo decepcionado de ese proyecto.
“No creemos en la alternancia y transición. El país y Oaxaca ya perdió tres años invertidos en una esperanza para terminar con 80 años de autoritarismo”, lamentó.
De acuerdo con López Ortega, hay contracción de la economía en Oaxaca, subejercicio de los recursos federales y desesperanza terrible en el pueblo “porque la expectativas de crecimiento, estabilidad política y tranquilidad social se han visto frustradas”.
Aun así, dijo que la izquierda en el país se tiene que refundarse y decirle a la a sociedad sin dobles discursos y doble moral, como la que priva en el ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, que la lucha armada es la opción.
En el caso del PCM, anticipó que utilizará todas las formas de lucha y sí la vía electoral es la opción, echarán mano de esa alternativa, explicando por qué lo hacen.
Empero, recalcó que sostienen el uso de la violencia sistemática para cambiar al país y Oaxaca, pese a ello, aclaró que no son partidarios de la violencia irracional para salir en marchas destrozando vidrios.
“Nosotros vamos por una violencia sistematizada, organizada en la que todo el pueblo se haga presente para derrocar el poder de los monopolios e instaurar una nueva economía y nueva nación”, llamó.
Explicó que el PCM habla de violencia revolucionaria donde los instrumentos que van a ejercer la violencia sean creados por la revolución y enfrenten a los instrumentos con los cuales la “burguesía” ejerce la violencia.
Puntualizó que con la creación de un ejército popular, milicias obreras, cuerpos de autodefensa y cuerpos guerrilleros, producto de una decisión de la clase obrera y la legitima defensa a la que tienen derecho los pueblos marginados y reprimidos, se gestará la lucha armada en Oaxaca.
“No hablamos de agredir sin ton ni son, ni pintarrajear la casa del trabajador, ni destrozar el carro del ciudadano que tuvo la desgracia de encontrarse en una movilización”, atajó.
Afirmó que el PCM condena las acciones vandálicas y opta por la defensa legítima del pueblo cuando son agredidos en su vida y economía.
En el caso del robo y saqueo que incurrió la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), en gasolineras de la Capital, cuestionó que los empresarios gasolineros se quejen de despojo cuando a ciudadanos comunes les roban gasolina al vender litros incompletos.
Lo mismo criticó a los hoteleros por los bajos salarios a sus empleados, al igual que los restauranteros.
López Ortega pidió ir a un debate serio sin doble moral sobre la realidad social en Oaxaca.
Al final, reconoció que el PCM, el Frente de Izquierda Revolucionaria y el Federación de Juventudes Comunistas no coinciden en algunas ocasiones con la posición política, con los trabajadores de los medios de comunicación, sin embargo, se solidarizarán con ellos ante las agresiones de que son objetos en los últimos días.
