El coordinador de los diputados federales oaxaqueños del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Héctor Pablo Ramírez Puga Leyva, dejó la puerta abierta a los priistas y pidió a quienes “no tengan la madurez y responsabilidad suficiente para estar en un partido como el PRI, optar por irse”, de esa fuerza política.

En medio del proceso de expulsión del ex gobernador del estado y la defensa de este, ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y los posicionamientos mediáticos de las diputadas locales priistas, Carmelina Cruz Silva y Claudia Silva Fernández, admitió que el tricolor tendrá que sortear una serie de problemas en los próximos meses debido a los resultados en contra durante el proceso electoral pasado.

Aclaró, sin embargo, que esto “no es la debacle que muchos quisieran (porque) somos un partido maduro y vamos a saber acoplarnos a nuestra nueva realidad”.

El ex vocero del Gobierno del Estado se sinceró y dijo que la altanería, la prepotencia y las traiciones de muchos priistas generaron un ambiente en el partido que ocasionó la derrota en las pasadas elecciones del cuatro de julio.

A escaso dos meses y medio de que culmine la faceta hegemónica del PRI en el Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial, negó una “desbandada” de priistas en la recta final de la administración del gobernador, Ulises Ruiz Ortiz.

Por el contrario, con la llegada del nuevo gobierno afirmó que tránsfugas del Revolucionario Institucional regresarán al poder.

Y es que –recordó– el gobernador electo Gabino Cué Monteagudo, el diputado local convergente Benjamín Robles Montoya, y el ex gobernador Diódoro Carrasco Altamirano alguna vez fueron militantes de ese instituto político.

“Son los mismos que estuvieron gobernando con el PRI los que hoy llegan al poder; es lo mismo, pero más barato”, soltó.

En tanto, reiteró que el diputado federal, Jorge Franco Vargas y el ex gobernador, José Murat Casab, les corresponde explicar cuál fue su papel durante las pasadas elecciones, “y si tienen la conciencia tranquila; si quieren seguir en el PRI no le veo mayor problema”, avaló.

Respecto, a la integración del presupuesto para el 2011, prometió que no habrá “revanchismo político”, de los legisladores federales del PRI, quienes irán, junto con el equipo del gobernador electo, por 52 mil millones de pesos para que “Gabino Cué (Monteagudo) no tenga ningún pretexto para cumplir con los compromisos que hizo”.

“Para que Gabino Cué no tenga ningún pretexto de poder invertir lo que necesita Oaxaca y para poder cumplir las promesas de campaña que hizo”.

“Entiendo que ese recurso tampoco es del PRI ni de los diputados federales, son recursos que van a ser de todos los oaxaqueños y que vamos a vigilar que todas las obras que quedaron pendientes se concluyan y que todos los recursos se apliquen de una manera transparente”, advirtió.