OAXACA, OAX., junio 6.- Humberto Alcalá Betanzos y Miguel Silva Selvas, dirigentes de la disidente Sección 59 del SNTE, señalaron este lunes que la única instancia que podría terminar con esa gremial es el consejo nacional del SNTE, porque es ahí donde se acordó su creación.
Sin embargo, se declararon “seguros de que no nos desaparecerán como dice la Sección 22 y el Gobierno del Estado porque nosotros trabajamos de manera puntual, cumplimos el calendario escolar, aplicamos toda la normatividad y las reformas que establece la Federación”.
Los controvertidos líderes de la disidencia magisterial, que antes encabezaron la directiva de la Sección 22, especialmente Alcalá Betanzos que fue secretario general, dijeron que hacen suya la Alianza por la Calidad de la Educación (ACE), que impulsa el gobierno del presiente Felipe Calderón y la lideresa nacional del SNTE, Elba Esther Gordillo Morales.
En nombre de la Sección 59 exigieron ser atendidos por el gobernador Gabino Cué Monteagudo; la secretaria General de Gobierno, Antonia Irma Piñeyro Arias; el secretario Particular, Benjamín Robles Montoya; el director del IEEPO, Bernardo Vásquez Colmenares Guzmán, y el director de Planeación, Daniel Pérez Montes.
Sin embargo, acusaron a Bernardo Vásquez y a Pérez Montes de “servir de matraqueros y tapetes de la Sección 22 para aniquilarlos”, e informaron que ya interpusieron una queja ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), luego de que el Gobierno del Estado y el gremio que dirige Azael Santiago Chepi acordaron “desaparecer” a la Sección 59, junto con todos los servicios que presta.
Al Gobierno del Estado también le demandaron “un alto al acoso gubernamental emprendido en su contra”.
Luego exigieron la entrega de la documentación que por ley corresponde a los 40 mil alumnos que atienden sus compañeros de gremio, además de respeto a su derecho al trabajo y al salario.
Silva Selvas dio a conocer que acudieron ante la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados federal “para que detenga las arbitrariedades y el despojo que pretende hacer el IEEPO a la Sección 59”.
Aseguró que “la Sección 59 llegó para quedarse y vamos a defender con todo el respeto a nuestros módulos y a las garantías individuales de los integrantes del gremio”.
Marcha y plantón de la Sección 59 a partir del miércoles
Por su parte, Alcalá Betanzos anunció que el miércoles próximo delegaciones de la Sección 59 y un porcentaje representativo de padres de familia se concentrarán en el Monumento a Juárez, del crucero a Guelatao, para marchar hacia el Zócalo de la Ciudad de Oaxaca e instalarse en plantón por tiempo indefinido.
A tres días de haber concluido el plantón de sus ex compañeros de la Sección 22, el dirigente de la Sección 59 aseguró que marcharan hacia el Centro Histórico “de manera respetuosa, sin violentar el derecho constitucional de nadie, ni afectar a terceros, ni bloquearemos edificios, ni tomaremos cruceros, además de que las clases que imparten continuarán”.
Lamentó que para congratularse con la Sección 22, el gobierno de Gabino Cué Monteagudo haya permitido una serie de desmanes, además de ceder al millonario pliego petitorio de sus opositores.
Para la Sección 59, Alcalá Betanzos demandó la instalación de una mesa de negociación con el Gobierno del Estado, en la que participen padres de familia, representantes de la sociedad y de los medios de comunicación.
“Una mesa abierta y plural donde se conozcan nuestros planteamientos y la respuesta del Gobierno”, dijo.
Culpa al Gobierno de posibles agresiones
Respecto a la persecución que sufrió el fin de semana pasado en la Ciudad de México por parte de integrantes de la Sección 22, Alcalá Betanzos confirmó que éstos “intentaron lincharme, pero quiero decir con claridad que en lugar de debilitarme me dan más fuerza”.
Acusó, sin embargo, que “si algún incidente se da que violente la integridad física y moral, mía y la de los que integramos la Sección 59, es responsabilidad del gobernador Gabino Cué, de la Sección 22 y de la Secretaría General de Gobierno”.
También responsabilizó al Director del IEEPO y a Daniel Pérez Montes, “porque se han convertido en un instrumento para implementar medidas en contra de la Sección 59; se están prestando a un juego sucio que puede derivar en violencia en las comunidades”, alertó.
Para Humberto Alcalá, ex dirigente de la Sección 22, “los espacios educativos le corresponden a los padres de familia y a los pueblos, por lo que si éstos dicen que no hay cabida para la Sección 59, no hay necesidad de comisiones tripartitas”.
Silva Selvas y Alcalá Betanzos recordaron que la Sección 59 nació en el pre pleno de noviembre de 2005 de la Sección 22. “El origen fundamental fue no acatar la corrupción que en ese tiempo representaba Enrique Rueda Pacheco y no respetar la diversidad ideológica”.
Indicaron que una vez expulsados de la Sección 22 integraron el Consejo Central de Lucha (CCL) para después dar paso a la Sección 59 del SNTE.
En julio de 2006 entregaron a la presidenta vitalicia del SNTE, Elba Esther Gordillo Morales, su solicitud para formalizarse como gremio, y para diciembre del mismo año el Consejo Nacional del SNTE aprobó la creación de la Sección 59 en Oaxaca.
Silva Selvas detalló que realizaron el trámite ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) y en agosto del 2008 los magistrados de la JFCA aprobaron, de manera unánime, la creación de la Sección 59 del SNTE.
