Nuestro mayor bien particular o común es ser libres

Fernando Savater, Ética para Amador.

Lo sustantivo para una sociedad deseable son las libertades individuales y que esas libertades sean en el terreno político y jurídico, iguales para todos pero sobre todo la búsqueda de la fraternidad de los más maltratados.

Philippe Van Parijs, un teórico belga arguye que una sociedad libre es una sociedad justa, por ello se debe concebir la justicia como la libertad real; mientras que el economista Amartya Sen, concibe que la expansión de la libertad es tanto el fin primordial del desarrollo como su medio principal. Por ello [dice] la eliminación de la falta de libertades fundamentales es parte constitutiva del desarrollo.

Los pensamientos anteriores caben cuando, la madrugada del 24 de febrero de este 2012 fue liberada bajo fianza, luego de la detención arbitraria y privación de su libertad, la defensora en derechos humanos, de la tierra y el territorio Lucila Bettina Cruz Velásquez.

Esta zapoteca de Juchitán fue detenida por la Procuraduría General de la República (PGR) en Santa María Xadani en cumplimiento a una orden de aprensión emitida el 12 de septiembre de 2011 por el Juzgado 6° de Distrito, luego de una denuncia presentada por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), aún contra las medidas cautelares emitidas por la Defensoría de los Derechos Humanos del estado.

Con un doctorado en Planificación Territorial y Desarrollo Regional en el extranjero, ha dedicado sus conocimientos esencialmente a denunciar las anomalías y perversidad del sistema, específicamente aquello que atenta en contra de las personas y comunidades campesinas e indígenas con los proyectos eólicos en la microrregión zapoteca y, sacar a flote que los campesinos hoy día se rebelan contra la exclusión y despojo de sus tierras.

Se tiene claro que el capital es el que se encuentra detrás de estos fenómenos y actos de injusticia que no buscan más que el desmantelamiento del campesinado y satisfacer los intereses de la gran empresa, sin importar que con ello se realicen atropellos a las garantías individuales y a las letras de nuestra carta magna y sus leyes secundarias.

La CFE y las empresas Desarrollos Eólicos de México S.A. de C.V (DEMEX), subsidiaria de la empresa española Renovalía Energy, no actúan solo contra Cruz Velásquez, sino en contra del campesinado, sobre sus condiciones de existencia, ellos ya lo comprendieron que es una manera en que el sistema lo incluye y lo excluye, lo necesita y lo explota, lo reproduce y lo expolia, pero sobre todo que lo obliga a contestar, todo sea de paso, por el desarrollo, un proceso que viene a rajatabla sin considerar la participación o consideración de los habitantes que viven el lugar.

No saben que el campesino solo subsiste en el capitalismo gracias a su lucha por mantenerse en posesión de por lo menos una parte de sus tierras. Si los campesinos no fueran capaces de sostener una lucha permanente por su existencia nada podría preservar de la rapacidad del capital que busca territorializarse.

Comisión Federal de Electricidad a pesar que aún cuenta con acciones del Estado, actúa con prepotencia y venganza contra la ciudadanía, como si no fuera gracias a nosotros los consumidores como se sostiene, no es el único caso, pues ha habido múltiples denuncias contra el alza injustificada de las tarifas eléctricas, libra en su contra varias demandas en el estado y el país, regularmente por abuso en la utilización de las tierras sin el consentimiento del comunero, ejidatario o propietario, tiene casos en donde se ha echado encima a la comunidad o comunidades completas, por expropiar las tierras sin la indemnización correspondiente, tal y como dictan las leyes.

Aunque se pensaría que para ello están las instituciones de impartición de justicia, pero no se otorga a cada quien lo que le pertenece y tiene derecho, sino la razón a quien posee poder económico y control de las instituciones.

El campesinado se halla muy lejos de hacer lo que puede y quiere hacer. Desde la colonia el campesinado venía con la renta de la tierra, a finales del siglo pasado y principios de este se han ido formando frentes como las transnacionales de transgénicos, los agentes energéticos y el propio Estado, conforman un triángulo malévolo que asfixia y restringe su libertad, estamos atestiguando un proceso que venía de la renta de la tierra pasando ahora por la renta de la libertad y de la vida misma, la diferencia es que ya despertaron y también saben utilizar las TICS, el empoderamiento y la inteligencia indígena, así como los medios para defender la supervivencia y la dignidad.