OAXACA, OAX., diciembre 3.- Ordenación presbiteral y oficiar la primera misa en su comunidad de origen, fueron hechos inolvidables y de trascendencia en la vida del sacerdote dominico, Fray Juan Efraín Hernández Cruz, de la orden de predicadores.

Fue el majestuoso templo de Santo Domingo de Guzmán, iluminado y saturado de fieles católicos de todos los estratos sociales, escenario de la solemne ceremonia efectuada el sábado 30 de noviembre, donde el arzobispo de la Arquidiócesis de Oaxaca, monseñor José Luis Chávez Botello, ordenó presbítero a Fray Juan Efraín.

El Arzobispo ante la presencia de unos 20 sacerdotes de la orden de Santo Domingo de Guzmán, desde el altar mayor del templo y con las manos extendidas, dijo:

“Dios y Padre nuestro, que para guiar y gobernar a tu pueblo has querido servirte del ministerio de los sacerdotes, concede a éste diácono de tu iglesia que ha sido elegido hoy para el presbiterado, perseverar al servicio de tu voluntad para que en su ministerio y en su vida, busque solamente tu gloria unido siempre a Cristo, el que vive y reina contigo”.

Destacó el momento en que los padres de Fray Juan Efraín—Justino y Guadalupe—lo bendijeron para entregarlo a la iglesia, mientras el padre provincial en nombre de la Orden de Predicadores y de la iglesia, llamó al elegido al orden del presbiterado para presentarlo ante el Obispo y pedir que sea ordenado.

El candidato manifestó la voluntad de cumplir su ministerio, según deseos de Cristo y de la iglesia y prometió obediencia y respeto al Obispo y superiores inmediatos.

Postrado ante el altar, se pidió a Dios que derrame sus dones ante el elegido, y se cantaron letanías para que el Supremo derrame en Fray Juan Efraín, la gracia sacerdotal.

Al nuevo Frayle dominico, un sacerdote de la orden de predicadores y los padres de Fray Juan Efraín, le colocaron los ornamentos sacerdotales y por la entrega del pan y el vino en las manos del nuevo presbítero, se indicó el deber que tiene de presidir la celebración eucarística y seguir a Cristo crucificado.

OFICIÓ SU PRIMERA MISA

Posteriormente, el domingo 2 de diciembre, en su comunidad de origen, San Jerónimo Yahuiche, el sacerdote Juan Efraín Hernández Cruz, ofició su primera misa ante padres dominicos, sus padres, familiares, amistades y cientos de fieles católicos.

Intervino y habló Fray Javier Sugasti, socio de provincial, quien felicitó a los padres de Juan por el fruto de una vida, de una educación y sobre todo de un amor profundo en la familia.

Ante feligreses dijo: nos hemos reunido para celebrar la fiesta de nuestra fe, la fe que muchas veces la vivimos en forma anodina y hoy queremos que sea una celebración a ley, porque tiene que ser testimonio de alegría de nuestra fe.

En su homilía destacó la presencia de padres dominicos y sobre la consagración de Juan Efraín, aseguró que nos tiene que llevar a todos por el camino de Jesús y por el camino de Santo Domingo.

Indicó que hay que contrarrestar la poca fe, porque se nos ha metido el consumismo y la búsqueda de lo material, la pérdida de la trascendencia.

Dijo que ordenarse de sacerdote, vivir de esta consagración dentro de la vida dominicana, tiene que ser un proceso de vida que comenzó hace unos años y va continuar madurando la vida de fe, la actitud de servicio, el mirar, el trabajo, siempre buscando lo que se puede redimir para poner la gracia de Cristo en aquellos que más lo necesitan.

Mostraron un cuadro enviado por el Papa Benedicto, el sacerdote Juan Efraín dio gracias a la comunidad y familiares, indicando que donde quiera que esté los llevará en el corazón y por primera vez entregó la hostia a quienes lo solicitaron después de haberse confesado.