SANTIAGO CAMOTLÁN, Oaxaca., diciembre 2.- Después de la décima sesión de trabajo efectuada este 30 de noviembre, entre las comunidades de Santiago Camotlán, no se llegó a un arreglo sobre la forma de elegir a su Ayuntamiento para el año 2013, por lo que agotadas las posibilidades de acordar por la vía del diálogo y la negociación, el caso será turnado al Consejo General del Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Oaxaca (IEEPCO), para que determine lo procedente.

Las Agencias de San Francisco Yovego, Asunción Lachixila, Cristo Rey La Selva y San Felipe Arroyo Macho reclamaron su derechos políticos para elegir a sus autoridades municipales en el año 2010, sin que las autoridades municipales de Santiago Camotlán los tomaran en cuenta, razón por la que en ese año, interpusieron un recurso de inconformidad a la elección ya que solo habían participado en ella, los ciudadanos de la cabecera municipal.

El Tribunal Estatal Electoral resolvió en diciembre de 2010 darle la razón a las agencias inconformes; por lo que anuló la elección realizada en la comunidad de Santiago Camotlán y esto orilló a que se designara a José Luis Hernández Juárez como administrador municipal en ese municipio, quien trató de manipular a su conveniencia a la cabecera municipal y a sus siete agencias; por lo que las agencias resolvieron llegar a un acuerdo para quitárselo de encima.

Las agencias inconformes propusieron a la cabecera municipal en enero de 2011, sentarse a dialogar para alcanzar un acuerdo en el que se respetaran sus derechos políticos. Después de varias sesiones de diálogo convinieron que las agencias respetarían la elección hecha por los ciudadanos de Camotlán para los años 2011 y 2012; pero que en 2013 tendrían que participar todas las comunidades para elegir a sus autoridades municipales.

El 3 de julio de este año, las autoridades de las agencias y cabecera de Camotlán fueron citadas a la Secretaría General de Gobierno, “con la finalidad de tratar asuntos relacionados con la administración de su agencia municipal”, por el Ing. Edmundo Antonio Hernández Gavilán, Coordinador Regional de la Costa, dependiente de la Subsecretaría de Operación Regional. Al principio de esa reunión les hablaron de sus caminos y al final de que tenían que ponerse de acuerdo en el proceso de elección de sus autoridades.

Las autoridades de las Agencias detectaron que Hernández Gavilán tiene una compañía constructora y que su interés no era resolver los problemas de las comunidades sino beneficiarse con la construcción de un camino en la zona, por lo que posteriormente pidieron que las reuniones se enfocaran en el asunto de la elección municipal y se realizaran bajo la coordinación del IEEPCO.

En las negociaciones realizadas ante el IEEPCO y con la participación de funcionarios de las Secretarías General de Gobierno y Asuntos Indígenas, las agencias presentaron propuestas distintas, sustentadas en el respeto a los sistemas normativos de sus comunidades y la rotación de cargos para que todas las comunidades tuvieran la posibilidad de integrar el Ayuntamiento.

La primera propuesta fue que el municipio se dividiera en tres regiones y que cada una de estas regiones pudiera elegir a sus representantes, quienes se rotarían todos los cargos del ayuntamiento, de esta manera todas las comunidades podrían estar representadas y sus ciudadanos podrían votar y ser votados. A cada región le correspondería elegir al presidente municipal cada tres años.

En otra sesión se generaron entre todas las comunidades tres propuestas que consistieron: una, en que todas las comunidades propusieran un candidato y el que obtuviera el mayor número de votos sería el presidente municipal y así seguiría en orden de importancia. Dos, que se sometiera a sorteo el cargo que le tocaría a cada comunidad. Tres, que se rotaran los cargos entre todas las comunidades, así cada comunidad podría elegir al presidente municipal cada ocho años.

La última propuesta presentada por las agencias consistía en que el municipio se dividiera en dos bloques, uno conformado por las agencias inconformes y otro por la cabecera municipal y las agencias que la apoyan. Cada bloque de comunidades elegiría al presidente municipal cada dos años, con el método que cada uno definiera. El resto de funcionarios del ayuntamiento se dividiría de manera equitativa entre los dos bloques, ya que cada uno de estos representa aproximadamente al 50% de la población total del municipio.

Los representantes de la cabecera municipal no tomaron en cuenta la propuestas de las agencias y después de varias reuniones insistieron en que la elección se hiciera por planillas, lo cual fue rechazado por las agencias inconformes, ya que eso rompería con los sistemas normativos de sus comunidades y los colocarían frente a una situación de competencia por el poder y la posibilidad de que se cometan actos de corrupción por quien esté interesado en alcanzar el puesto de presidente municipal.

En la novena negociación realizada el 22 de noviembre pasado, los representantes de la cabecera municipal presentaron en la mesa un acta de elección del ayuntamiento para el año 2013, misma que fue rechazada por las agencias inconformes, ya que el acto fue calificado como una decisión unilateral; así mismo funcionarios del IEEPCO anunciaron que esta elección podría ser rechazada por el Consejo General del IEEPCO.

Esta situación provocó que en asambleas masivas realizadas en las comunidades de Lachixila y Yovego, las agencias inconformes rechazaran la elección y sostuvieran su propuesta apegada a sus sistemas normativos indígenas, pues no quieren transitar al sistema de partidos políticos, ya que ese sistema juzgan se presta a manipulaciones y actos de corrupción que podrían provocar divisiones y confrontaciones al interior y entre sus comunidades.

La decisión que hoy tiene en sus manos el IEEPCO es importante, ya que existen en el estado muchos interesados en deteriorar las formas indígenas de organización, como ha sucedido recientemente en el municipio de Cabecera Nueva, por lo que las agencias inconformes de Camotlán le hacen un llamado a que respete y valore los sistemas normativos indígenas, pues estos son los que han hecho posible la gobernabilidad en Oaxaca y la gobernanza en las comunidades indígenas.